Presenté mi libro «Estanflación» en Buenos Aires

Estuve tres días en Buenos Aires para presentar mi nuevo libro. El día de mi arribo, domingo 23 de noviembre, salió en La Nación un reportaje que me había hecho por teléfono Jorge Oviedo. Ese mismo día estuve en el programa Hora Clave, de Mariano Grondona. Abajo aparecen los videos digitalizados:

El lunes 24 estuve en el piso de radio Continental, participando en el programa de Victor Hugo Morales. Para quienes quieran escuchar lo que dije, aquí está la grabación:


http://www.soundlantern.com/UpdatedSoundPage.do?ToId=23002&Path=null

El martes presenté el libro en el Club del Progreso. Uno de los invitados amablemente lo grabó en video, y aunque no se ve muy bien en Youtube, agrego los links por si alguien lo quiere ver.

http://www.youtube.com/watch?v=EavYwLB69dE

http://www.youtube.com/watch?v=BMWR43ItTWY&feature=

También respondí varios reportajes telefónicos de radios de Buenos Aires, Rosario y Córdoba, pero no tengo las grabaciones digitalizadas. De todos modos mis respuestas no fueron diferentes a las que dí en el reportaje de Victor Hugo Morales.

Finalmente, el miércoles 26 estuve en dos programas de televisión. El de Osvaldo Granados en Metro, cuya versión digitalizada aún no tengo y en el de Clara Mariño en Canal 26, que también agrego a continuación:

Si han llegado a esta altura del post, comprenderán porqué esta semana no pude escribir nuevas notas. Pero me hice tiempo para responder todos los mensajes que llegaron a mi blog, aunque pido disculpas a los visistantes por algunas demoras. Ahora estoy en Colombia y espero retomar el contacto con mis lectores con nuevas notas, que subiré tan pronto como las termine de escribir. Muchas gracias.

«Estanflación», título de mi nuevo libro

Acompañando a este título aparece el subtítulo: «Inflación con Recesión», como definición del término «Estanflación». Y más abajo, una síntesis del objetivo del libro: explica  «cómo evitar un nuevo «Rodrigazo» y otros peligros de la economía Kirchnerista».

Rosendo Fraga ya ha incluído una reseña del libro en su sitio, la que quiero compartir con Ustedes, porque seguramente es mas objetiva que la que podría escribir yo.

Mañana saldrá en La Nación un artículo sobre el libro, con un breve reportaje que me hizo por teléfono Jorge Oviedo para el suplemento económico. También mañana espero hablar sobre su contenido en el programa Hora Clave que conduce Mariano Grondona en C5N.

Espero que sirva para entender los riesgos que enfrentan nuestra economía y nuestra sociedad y la estrategia que debería seguirse para evitarlos y poder retomar con éxito el camino de la estabilidad y el crecimiento sostenido, en una sociedad menos conflictuada y mas esperanzada.

 

Perú, firme en su buen rumbo

Perú cambió su organizacion económica a principios de la década del 90 en la misma dirección que lo hizo nuestro país y, prácticamente, por las mismas razones: como Argentina, el Perú había vivido años de alta inflación con estancamiento y terminado en hiperinflación. Consiguió, desde entonces, vivir con baja inflación y recuperar el crecimiento económico sostenido.

A pesar de que el Presidente Fujimori, que inició el cambio, fue muy criticado por sus manejos políticos y por la corrupción de su gobierno, como ocurrió en Argentina con el Presidente Menem y que, como en nuestro país, hubo un período, al final del Gobierno de Fujimori, en que la economía entró en recesión, los gobiernos que reemplazaron a Fujimori, primero el del Presidente Paniagua, luego el del Presidente Toledo y ahora el de Alan García, mantuvieron las mismas reglas de juego para la economía. Nunca se produjo en Perú un quiebre institucional, en materia económica, como el que significo en nuestro país el Gobierno de Duhalde y nunca se destruyeron las reglas de juego de la economía como, luego de Duhalde, continuaron haciéndolo Nestor y Cristina Kirchner.

La continuidad de políticas económicas y el respeto de las reglas de juego de una economía de mercado, abierta al mundo y con estabilidad monetaria, están produciendo un rédito evidente para el pueblo del Perú. Hace algunas semanas pasé dos días por Lima, de regreso a la Argentina y pude constatar el clima de prosperidad económica que se vive, no solo a la vista del viajero que no había visto la ciudad desde varios años atrás, sino a través de los comentarios, tanto de humildes trabajadores como de encumbrados empresarios. Y esa percepción la tuve a pesar de que Perú estaba en medio de una crisis de su gabinete por denuncias de corrupción. Claro que el Presidente Alan Garcia, lejos de desmerecer las denuncias, respondió removiendo a los ministros sospechados y mandó a investigarlas sin ninguna reserva. Qué diferente al clima que encontré en Argentina unos pocos días después!

Hoy he leído en los diarios que Perú acaba de firmar un acuerdo de libre comercio con China, muy parecido al que en forma pionera firmó el año pasado la República de Chile. El Presidente Chino, Hu Jintao, anticipó un día su visita a Lima, originariamente programada para participar en la importante reunión de APEC (Comisión Económica Asia Pacífico) que se esta llevando a cabo en esa ciudad, precisamente para firmar este acuerdo de libre comercio. Lo hizo acompañado por una impresionante delegación de empresarios y funcionarios chinos de mas de 600 personas.

Perú ya había conseguido que el Congreso de los EEUU aprobara el tratado de libre comercio con el país del norte, semejante también al que hace algunos años firmaron Méjico, Chile, Colombia y casi todos los países de Centroamerica y del Caribe. (El acuerdo entre Colombia y EEUU aún esta pendiente de aprobación en el congreso norteamericano y constituirá un test sobre la vocación del Presidente Obama por apoyar el libre comercio). Además, Perú y Colombia ya consiguieron que la Unión Europea esté dispuesta a negociar el tratado de libre comercio con estos dos países y no con la CAN (Corporación Andina de Naciones, que integran además Bolivia, Ecuador y Venezuela) como se había condicionado anteriormente por la Unión Europea. Esta decisión de la Unión Europea es muy promisoria porque remueve el obstáculo que significaba la negativa de Bolivia, Ecuador y Venezuela a avanzar hacia el libre comercio.

En síntesis, Perú esta siguiendo los pasos de Chile al mantenerse como una economía de mercado, abierta y estable, con acuerdos de libre comercio con todas las regiones y naciones importantes del mundo. Méjico, Colombia, Brasil, Uruguay y casi todos los paises de Centroamerica y el Caribe, están siguiendo el mismo camino. Las únicas que estan encerrándose y aislándose cada vez más, con graves consecuencias estanflacionarias, son las economías de Argentina, Ecuador, Bolivia, Nicaragua y Venezuela, naciones que han aceptado seguir el rumbo del Comandante Chavez en su temerario viaje hacia el «Socialismo del Siglo XXI». Viaje que terminara retrotrayendo a nuestras naciones a las peores experiencias de populismo y aislamiento internacional que caracterizaron a las penosas décadas del 70 y del 80, del siglo pasado.

 

 

Los chinos ven a la crisis global como una oportunidad para corregir desajustes internos

Durante la última semana escuché muchas exposiciones de altos dirigentes chinos y participé en discusiones sobre lo que debe hacer China frente a la crisis financiera global. Tengo la sensación que esta vez, como ya ocurrió en 2005, los debates en este quinto Foro sobre las Finanzas Internacionales (IFF2008) permiten anticipar las futuras políticas del Gobierno Chino.

Yo había participado, en el año 2005, en la segunda versión de este mismo foro. En esa oportunidad presenté el trabajo que habíamos preparado con Joaquín Cottani titulado: “Debería China revaluar su moneda?” Pocos meses después de aquella reunión, el Banco Central de China anunció su nueva política cambiaria, precisamente la cuestión que había sido motivo de debate en el foro. Desde entonces la moneda china (el Ramimbí, su nombre internacional, o el Yuan, como se lo denomina popularmente dentro de China) se apreció más del 20 % con respecto al Dólar. Esto ayudó a China a neutralizar, en parte, el impacto inflacionario interno del aumento de los precios internacionales de la energía y los alimentos.

 

El manejo de la política cambiaria por parte de China en los últimos tres años estuvo a mitad de camino de la que aplicó Brasil (que dejó que su moneda, el Real, se apreciara frente al Dólar, mucho más que lo que se apreció el Ramimbí) y la que aplicó Argentina (que prácticamente mantuvo fijo el valor del Peso frente al Dólar). Igual que Argentina, China apeló además a la fijación de precios internos de la energía y de los alimentos bastante por debajo que los internacionales. En consecuencia debió financiar, como nuestro país, un fuerte aumento en el presupuesto de subsidios, algo que para China no es un gran problema porque su situación fiscal es muy holgada y no depende de la bonanza internacional. En esta materia aventajan significativamente a nuestro país, cuya holgura fiscal es totalmente dependiente de los altos precios de los productos de exportación.

 

Para esta nueva reunión del foro, su quinta versión, Joaquín Cottani y yo preparamos justamente un nuevo trabajo titulado: “Distorsionando la micro para embellecer la macro” en el que criticamos este tipo de intervención estatal en el sistema de precios de mercado acompañados por subsidios fiscales, aplicados en forma extrema por Argentina y en forma más moderada, pero igualmente distorsiva, también por China.

 

A pesar de que nuestro trabajo no elogia, sino que, por el contrario, advierte sobre los costos y peligros que acarrea este tipo de intervención estatal en los mercados y lo hace no sólo en referencia a nuestro país, sino también a la propia China, los organizadores del evento publicaron nuestro trabajo, en Inglés y en Chino, en el libro conmemorativo del IFF2008. Una clara demostración de que el Gobierno Chino no le tiene miedo a las críticas, algo muy diferente a la actitud del Gobierno Argentino.

 

La importancia que el gobierno Chino le dio a esta quinta versión del Foro sobre la Finanzas Internacionales 2008 se podía visualizar en las amplias avenidas de Beijing que estuvieron embanderadas toda la semana con emblemas y leyendas alusivas a esta reunión. Los organizadores del foro destacaron que este tipo de decoración de la ciudad, alusiva a eventos que se desarrollan en la misma, ocurrió en sólo tres ocasiones durante este año: las otras dos fueron las olimpiadas y el encuentro reciente entre los líderes gubernamentales europeos y asiáticos. Destaco este detalle anecdótico, porque sugiere que las discusiones que tuvieron lugar en el foro no caerán en saco roto, como no lo hicieron las discusiones del 2005.

Para no agobiar a los visitantes de este blog con demasiados detalles, paso a resumir mis conclusiones sobre lo que los chinos están haciendo para transformar a la crisis financiera global en una oportunidad.

 

En primer lugar ya han decidido implementar políticas monetarias y fiscales expansivas de la demanda interna por montos que en los próximos cuatro años significarán, en conjunto, alrededor del 15 % de su Producto Bruto Interno. Lo pueden hacer porque frente a la bonanza externa de los últimos años habían aplicado precisamente políticas monetarias y fiscales internas restrictivas y habían acumulado un impresionante nivel de reservas internacionales. Es interesante destacar además, como ya lo señalé en mi nota anterior sobre la crisis global vista desde China, que estas medidas de expansión fiscal, a pesar de que procuran elevar la demanda interna, no se desentienden de la necesidad de impulsar aumentos de productividad. De esta forma apuntan a que haya también una respuesta rápida de la oferta de bienes y servicios y no aumente la inflación.

 

En segundo lugar, y esto surgió explícitamente en las discusiones del foro, los chinos aprovecharán la baja de los precios internacionales de la energía y los alimentos y las menores presiones inflacionarias que vienen desde afuera de su economía, para acercar rápidamente los precios internos a los precios internacionales, de manera de evitar los subsidios destinados a financiar distorsiones y poder dedicar esos recursos a financiar rebajas de impuestos que hasta hoy encarecían los costos de los productos de exportación. Es decir, el Gobierno Chino se prepara para remover todas las distorsiones a las que se refiere nuestro trabajo sobre Argentina y China.

 

En tercer lugar, los Chinos utilizarán toda su influencia en los organismos y foros internacionales, así como el uso externo de la capacidad de financiamiento que le otorga su fuerte nivel de reservas internacionales, para asegurarse que los países del mundo no apliquen políticas comerciales de cuño proteccionista y, por el contrario, mantengan sus economías abiertas al comercio, tanto en relación a los bienes y servicios en general como en relación a los productos de origen chino. Esto significa que China no brindará apoyo financiero a los países que impongan restricciones a la entrada de productos chinos a sus economías, salvo que esas restricciones estén especialmente aceptadas por las reglas de la Organización Mundial del Comercio y sean no discriminatorias contra China.

 

Así como en varias de mis notas anteriores sugerí a nuestros gobernantes prestar atención a la experiencia de Brasil, aprovecho esta nota, escrita mientras estoy volando de Beijing a New York, para exhortar a Cristina y Nestor Kirchner a prestar mucha atención a las decisiones del Gobierno de Hu Jintao, porque la experiencia China les puede ayudar a advertir cuan equivocado es el enfoque con que se están conduciendo tanto la política económica como la política exterior en Argentina. Lamentablemente mientras Bush, Lula, Brown, Sarkozí y casi todos los demás líderes mundiales se reunieron bilateralmente con el presidente Chino en oportunidad de la reunión del G-20 en New York, tal como lo muestran las tapas de todos los diarios de China del domingo 16 de noviembre, nuestra cancillería no encontró interesante, o no consiguió, una entrevista de Cristina Kirchner con Hu Jintao. Una pena.

 

 

 

La Corte Suprema argentina abre las puertas a la libertad sindical

Mensaje de Domingo Cavallo recibido por correo electrónico:

Quiero compartir con los visitantes de este blog este importante artículo de Armando Caro Figueroa, cuyo contenido refleja la opinión de todos los argentinos que queremos un país moderno con pleno goce de todas las libertades que garantiza nuestra Constitución Nacional.

Domingo Cavallo.

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El 11 de noviembre será recordado como el día en el que la Argentina dio un paso de gigante hacia la libertad sindical, dejando atrás décadas de monopolio y exclusiones.

Y lo será gracias al empeño de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), un sindicato tradicional ideológicamente reconvertido, y a la lucidez de la Corte Suprema de Justicia (CSJN) que, apartándose de los precedentes y haciendo caso omiso de los poderes institucionales y fácticos que exhibe la Confederación General del Trabajo (CGT) decidió, en una importante sentencia inaugural, hacer realidad la supremacía de la Constitución Nacional y de los tratados internacionales.

Durante más de 60 años el llamado modelo sindical peronista [1] , resistió todos los decenales embates (1956[2] , 1966[3]  y 1976[4] , 1984[5] , 1996[6] ), y encontró la manera de salir fortalecido después de cada uno de ellos.

Así y en lo que se refiere a los “delegados de fábrica”, la vigente Ley  23.551 (arrancada o concedida por el Presidente Alfonsín en el marco de un desafortunado pacto político del radicalismo con un sector del sindicalismo peronista) blinda al sindicato único dentro de la empresa, reconociéndole derechos que hasta entonces el peronismo político se había abstenido de reconocer.

Aquel modelo resistió también a lo largo de estos años la prédica, a veces excesivamente prudente pero constante, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que daba lugar a explicaciones forzadas y promesas insinceras de las autoridades locales.

El fallo unánime de la CSJN, de impecable factura democrática, toma el toro por los cuernos y supera con creces los tímidos avances hacia el pluralismo y la libertad sindicales ensayados durante los primeros 25 años de democracia [7].

Si bien la sentencia se circunscribe a reconocer el derecho del sindicato menos representativo (en el caso: ATE respecto de PECIFA) a instar la celebración de elecciones a delegados de personal y el derecho de sus afiliados a presentarse como candidatos, su clara línea argumental sienta las bases para desarticular los otros dos pilares del modelo sindical peronista: el monopolio para negociar convenios colectivos de trabajo (entre otros poderes excluyentes), y el monopolio sobre el gobierno de las Obras Sociales.

Aún cuando esta no sea la opinión del señor Ministro de Trabajo ni del Procurador General de la Nación, que pretenden limitarlo al ámbito del sector público, pienso que el pronunciamiento de nuestro alto tribunal sienta principios válidos para todas las ramas, sectores o empresas.

En realidad, el fallo abre la posibilidad de generar órganos de representación obrera en los centros de trabajo, no necesariamente sindicalizados, mas parecidos a los comités o consejos de empresa europeos que a nuestras tradicionales “comisiones internas” controladas absolutamente por las cúpulas sindicales.

Estamos, en mi opinión, ante una excelente noticia para las instituciones de la república, para los equilibrios imprescindibles dentro del sistema de relaciones laborales, y también para los intereses de los trabajadores, por mucho que el sindicalismo tradicional se empeñe en equiparar pluralidad representativa con debilidad obrera o agite el fantasma del clasismo de izquierda para afligir a sus compañeros de ruta dentro del mundo patronal.

En resumen, de los tres pilares del modelo sindical peronista (monopolio de la negociación colectiva, monopolio de la acción sindical dentro de la empresa y gestión monopólica de las obras sociales), la sentencia de la Corte demuele al segundo y abre una apreciable brecha dentro del primero.

Lamentablemente, de momento no hay indicios de que alguno de los poderes del Estado vaya a atreverse a abolir el monopolio sindical sobre las Obras Sociales que la dictadura de Onganía concedió al vandorismo.

Salta, 12 de noviembre de 2008.

[1] Si se recuerda que Augusto T. VANDOR, el asesinado líder de la Unión Obrera Metalúrgica, y sus seguidores, fueron quienes obtuvieron de gobiernos no peronistas medidas de consolidación del unicato gremial (tales la Ley de Obras Sociales de 1970 y la vigente Ley de Asociaciones Sindicales de 1987), resultaría mas rigurosa la denominación de “modelo sindical vandorista”.

[2] Decreto Ley 9.270/56, a través del cual el Gobierno de facto presidido por el General Aramburu intentó implantar la pluralidad sindical.

[3] Decreto 969/66, dictado por el Presidente radical Arturo U. Illia, que promovía el pluralismo y la federalización de los sindicatos.

[4] Decreto 9/76, mediante el cual la dictadura del General Videla congeló la acción sindical, hasta la nueva regulación dada por la Ley 22.105.

[5] Proyecto de Ley impulsado por el Presidente Raúl Alfonsín y su Ministro de Trabajo Antonio MUCCI y abortado por el peronismo político.

[6] Reconocimiento administrativo de la Central de Trabajadores de los Argentinos (CTA) y desbloqueo de miles de solicitudes de “inscripción” y “personería” gremiales.

[7] Así, por ejemplo, la “simple inscripción” de la CTA (en 1996) y la ley 24.185 de negociación colectiva para el sector público (1992).